Apagan las luces, sobre un fondo de realidad, la imaginación teje: Los personajes se duplican, se desdoblan, se evaporan y se condensan. Pero una conciencia los domina a todos: LA DE AQUEL QUE SUEÑA. El juego del sueño en EL CUARTO DE LOS ESPÍRITUS no se instala en el sueño, la estrategia dramática implementada, en definitiva, la de la visión oblicua; en que lo onírico no es convocado sino con el objetivo de resaltar la realidad, ofrecer(nos) un punto de mira sobre el mundo, punto a partir del cual la ficción teatral penetra el núcleo de lo real al considerar la vida en la cúspide y preguntar a nuestra memoria colectiva, ¿si acaso el sueño, atravesado de sueños, no toca también esa cúspide de toda existencia que es la muerte?
El aplauso como código metateatral -encuentra en la composición-, nuestro ingreso al pacto ficcional. “Han llegado” (…) Nos espejan, en tanto que, como fragmento, cada receptor implícito (espectador), que somos de esta vida ordinaria, esta vida de “cualquiera” que no parece durar sino un instante y que, sin embargo, se extiende de manera monótona y repetitiva ante nuestros ojos, en la gris uniformidad de lo cotidiano y al mismo tiempo, como obra, nos han sacudido -por fantasmas-, de nuestras desesperanzas diarias. Heterotopía que no cesa de agregar “juego”, es decir, distancia y diferencia entre sueño y realidad, distancia constitutiva entre sí mismo y no-sí–mismo que nos caracteriza, al testimonio de ese Otro, justamente, de ese nosOtro dentro de sí mismo, que no cesa de huir delante suyo y de esconder(sé) a medida que él se aproxima. De sí mismo (humanidad) que permanece(mos) para él como un desconocido.
Al explorar, como investigadora sobre las ambigüedades contemporáneas que rodean la categoría "cuerpo" -abierta- de de-subjetivar la universalidad de las ideas sobre él como entidad singular, tejido humano del individuo en cuanto, al "yo" como invisible, sin forma y liminal, el problema de la presencia, ausencia y representación, siendo temática central en lo contemporáneo, el restituir a la presencia en representación a través de los signos que puedan dar cuenta de esa ausencia. Denotando, una presencia sustancial dentro de las estéticas latinoamericanas, que encuentran la relación de la acción con los dispositivos representacionales en el espacio fúnebre en esa doble condición (liminal) que habita en concepto de representar la presencia en un contexto entre la vida y la muerte. Es ahí, donde la creación me pregunta, a través de nuestro contexto Colombia, sobre los niveles de cercanía o lejanía en la identificación del espectador (receptor), ¿qué lugar tiene el arte del cuerpo en un país de cuerpos desaparecidos? Ayer, PANTOLOCOS me responde, por medio de un goce dramatológico -al jugar como espectadora-, des-vestir la escena puntada a puntada, esquematización de sus costuras- estructura(s) Urdimbre-Trama: LA GRAMÁTICA ESTARÁ EN LOS PIES. Un cuerpo-en-vida dilata la presencia del actor y la percepción del espectador en la construcción del vínculo existencial con el acontecimiento. El cuerpo humano es sumido bajo estrategias de perlaboración y como campo metodológico cuya experimentación de diversas concretizaciones poiéticas durante la puesta en relieve, se puede leer. Dramaturgia Física Corpórea, suspiros al idiolecto y cuerpo diseñado a esa figura intra-textual que es el receptor implícito para actuar sobre él, verdadero destinatario del texto y quien decidirá si una vez atravesado el umbral del teatro anula el texto, lo olvida, o como nos sucedió anoche, lo prolongue en el mundo y lo transforme, lo relativice o atenúe al menos sus, nuestros rígidos perfiles, duras aristas, su falsa evidencia, pues lo que llamamos realidad es una imagen construida culturalmente, socialmente. Pero, ¿dónde se encuentra ese tercer espacio, ese lugar intermedio entre la escena, el cuerpo que hay sentado en la butaca, ese punto mágico en el que todo se rompe, en el que el tiempo vence su propio ritmo, en el que combaten ideas, sensaciones, recuerdos, sentimientos, creencias, deseos, temores?...¿Dónde hallar ese verdadero espacio inmaterial en el que toma forma? Hoy, 31 de agosto, EL CUARTO DE LOS ESPÍRITUS – PANTOLOCOS en la celebración de la 20 Fiesta de las Artes Escénicas de Medellín, presentándose, en el Teatro Comfama 7:30 p.m.