Después de poco más de cuatro años de reposar en las catacumbas, El cuarto de los espíritus emerge de nuevo a la superficie entre el estremecimiento de alegría y pasión que Pantolocos siente por su regreso, durante una gira que iniciará este 16 y 17 de marzo de 2024 en el
Teatro Jairo Alberto Valencia. De próximo, la obra partirá rumbo a Bogotá y será invocada sobre las emblemáticas y honorables tablas del
Teatro La Candelaria en el marco del
FESTA 2024 (Festival de teatro alternativo). Siguiendo su curso, habitará las tablas del magistral
Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella en mayo. Así, entre bombos y platillos, Pantolocos celebra el regreso de esta obra y el inicio de una gran gira durante 2024.
Estrenada en 2016, El cuarto de los espíritus es una obra que revoluciona los procesos investigativos de Pantolocos en su búsqueda por una poética escénica propia e integral, así como una obra que les permite abrir diversas puertas en el país y el exterior. Con aproximadamente cuatro remontajes consecutivos entre 2016 y 2019 (casi cuatro versiones completamente distintas sobre la misma premisa), El cuarto de los espíritus fue siempre una obra que puso al límite las capacidades creativas, técnicas y conceptuales del elenco y el equipo creativo de Pantolocos, quienes se consumaron durante aproximadamente tres años a su composición, análisis y materialización, bajo un proceso de creación colectiva.
Es recordada por Pantolocos como una obra de grandes conquistas y un pilar hacia una nueva fase investigativa de su trabajo. Fue casi una rebelión del elenco ante la monotonía de su trabajo confinado durante más de 10 años a un formato escénico de clown que, si bien resultó exitoso y fue bastante acogido por diversos públicos, resultó convirtiéndose en una camisa de fuerza para el deseo creativo del elenco y la necesidad de expandir los horizontes del arte escénico y sus conexiones con la vida, la más profunda pasión de Pantolocos. En este mismo sentido, puede decirse que fue una aventura arriesgada en la que el elenco se propuso no “satisfacer las expectativas de su público”, a riesgo de perderlo, buscando explorar otros senderos creativos y escénicos con la necesidad de trascender los propios automatismos, estereotipos y conformismos escénicos, y vincular la actividad creativa a las nuevas preguntas que el elenco se formulaba sobre la vida y el arte.
También fue una obra en la que el elenco expuso de manera directa diversos lenguajes, técnicas y poéticas corporales, musicales y escénicas que siempre estuvieron confinadas al interior del grupo como parte del “training” o proceso entrenamiento, investigación y ensayos. El cuarto de los espíritus da lugar a la palabra, locuciones, monólogos y diálogos, fuertes reflexiones, argumentos y cuestionamientos filosóficos y sociales, con una propuesta de personajes que se encuentran flotando a medio camino entre el clown, el mimo, la farsa, el teatro físico, teatro musical, entre otros, lo cual debió resultar insólito para muchas y muchos espectadores fieles que quizás estaban bastante acostumbrados a escuchar esos grammelots, jerigonzas, onomatopeyas e idiomas inventados con que los clowns de Pantolocos acompañaban su acción física y su juego carnavalesco.
Un hito importantísimo que marca esta obra es la aparición de un elenco renovado que conjugaba la generación de sus fundadores y una nueva generación de Pantolocos y Pantolocas nacidas en el seno de los semilleros, laboratorios y procesos de formación que Pantolocos mantuvo en el Corregimiento Altavista. También cabe resaltar que, gracias a El cuarto de los espíritus, Pantolocos pisó por primera vez las tablas del Teatro Pablo Tobón Uribe de Medellín, ganándose el corazón y aprecio de este teatro emblemático que abrió sus puertas al colectivo haciéndolo parte de su casa. Después del
Teatro Pablo Tobón Uribe, empezaron a llegar, uno tras otro, teatros, festivales y escenarios honorables que abrieron sus puertas a Pantolocos.
Estas son algunas de las incidencias y transformaciones que esta obra tuvo sobre el grupo, su visión artística y su lugar en la escena de la ciudad y el mundo. Por estas y por muchas sorpresas que la obra suscitará, les invitamos a no perderse el regreso de El cuarto de los espíritus de Pantolocos durante 2024. Y como diría en una de sus líneas el personaje Garbancero: